El Tipo de interés en una hipoteca o préstamo hipotecario
Los Tipos de interes en las hipotecas
El tipo de interés es una de las partes más importantes a la hora de pedir un credito o hipoteca. Exactamente, es el porcentaje que se aplica al capital pendiente para calcular los intereses que se deben pagar.
El tipo de interés puede ser fijo, variable o mixto.
- El tipo de interés fijo, como su propio nombre indica, es el que se mantiene constante durante toda la vida del préstamo o hipoteca. (suele tener un menor plazo de amortización que el resto de los tipos de interés, entorno a los 13-15 años)
- El variable, es el que se actualiza y revisa en los plazos acordados en el contrato del credito o hipoteca con la entidad financiera. Su ventaja es que te beneficia cuando bajan los tipos de interés, pero te perjudica cuando suben. Normalmente depende del Euribor, al que se le suele sumar una diferencia que puede oscilar entre 0.40 y unos 1.50 puntos.
- El interés mixto es aquel que mantiene un precio fijo durante los primeros años y el resto del tiempo hasta su extinción será variable.
Ya que los dos tipos de interés tienen grandes inconvenientes, existen tres tipos financieros híbridos que ayudan a ajustarse mejor a las necesidades individuales:
- Tipo de interés mixto: En el se negocia que el préstamo hipotecario sea fijo durante los primeros años (normalmente de 3 a 5) y el resto de los años será variable (hasta su cancelación). En este tipo, las condiciones del préstamo suelen ser muy parecidas a las del tipo variable. La ventaja que tiene es que permite fijar unas condiciones durante unos años, lo cual viene muy bien para los jóvenes.
- Hipoteca de cuota fija: es un préstamo a interés variable, pero con una cuota de amortización que no varia, es decir, que si el tipo de interés sube, no vamos a pagar mas cantidad en nuestras cuotas, pero si pagaremos mas numero de cuotas (o meses). Y si bajan los tipos de interés, entonces se rebajara el numero de cuotas.
- Hipoteca variable con techo: es una especie de “seguro”, esta hipoteca sirve para pactar un máximo en los tipos de interés durante un plazo (normalmente los 9-10 primeros años) y así poder evitar los riesgos de que si los tipos de interés suben exageradamente, no tengamos que pagar una cuota de amortización que no podamos permitirnos.
Debemos tener ojo y mirar bien las ofertas tentadoras en las que el tipo de interés es muy bajo en los primeros años y mirar también otras características fundamentales, como por ejemplo las comisiones.
Si optamos por una hipoteca de interés fijo, hemos de saber que en caso de bajar mucho los tipos de mercado, es posible que podamos renegociar las condiciones de la hipoteca o préstamo, o incluso una cancelación anticipada. Por esto mismo las empresas financieras suelen tener unas comisiones de cancelación que suelen ser caras.
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